lunes, 16 de abril de 2012

Soy un Espectador

Los Espectadores [de cine, conciertos, libros, tebeos, televisión y arte en general] somos legión. Desde Duchamp, sino antes, se conoce que la obra también la crea su observador.
Pues, los Espectadores pronto iniciaremos la lucha para que se valore nuestra participación, nuestra basta obra, y podamos vivir de ello.
No pedimos mucho, tan solo una recompensa por nuestro esfuerzo: a ver si vamos a tener que trabajar de gratis.


4 comentarios:

  1. Soy un tubérculo, fríeme, hiérveme o ásame, pero no creas que vivo del aire. Gracias por tus bocados.

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  2. ¡¿¡No estarás osando, Joe, a comparar a los Espectadores [de películas, música, libros, televisión y arte en general] con un tubérculo!?!
    Los Espectadores somos legión y pronto nos uniremos contra aquellos que nos menosprecien o nos hagan ejercer de manera gratuita.

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  3. ¡Me apunto! Dadme una trinchera y a por la siguiente posición a conquistar.

    En los principios del cine, con el Nacimiento de una nación (1915), por ejemplo, en la que ya se introduce la narració simultánea o cambio de eje (enseñando lo que está pasando en una localización y luego lo que está pasando en otro lugar al mismo tiempo), ya se da por hecho que es el espectador el que, de forma activa, ha de hacer realmente el corte/montaje de lo que está viendo.

    Alternancia de planos también. El cine, desde sus primeros pasos, ya asume ese principio. está claro que luego se hacen productos que invitan más a esa acción y parece que el resto, por comparación con estos, no dejen margen al espectador para cocinarse su film. Pero en realidad siempre lo hace.

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  4. tenemos una trinchera para tí, claro, poliket. sabíamos que te unirías en esta cruzada. y nos encanta la aportación cinematográfica que haces.

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