De manera cíclica
regresamos a Bilbao. Esta última vez, además, acudimos a La Casa de Atrás. Ese
establecimiento total que regenta Carlos G. De Marcos. Es una casa de tatuajes,
pero no solo eso. Es un vórtice, otro. Como el Hotel Chelsea, o Tánger. Venden
discos y libros que además son conjuros. Fuimos a ciegas. Le dijimos a Carlos:
escoge 5 libros que nos abran las entrañas y nos los llevaremos.
Esta fue la selección:
“La vida de las abejas y
de las hormigas”, de Maeterlinck. Libro fundacional de la sociología animal:
puro realismo mágico.
“La ópera flotante”, de
John Barth. Que no es un libro, sino un laberinto.
“El misterio de las
catedrales”, de Fucanelli. Arqueología de la ciencia en la edad media.
“Cosmos”, de Wtold
Combrowick. Una novela policíaca sobre la formación de la realidad.
y
“El retorno de los
brujos”, de Louis Pauwels y Jacques Bergier. Desbordado alegato a favor de la
voluntad de creer.
No comprobamos los
títulos escogidos hasta que regresamos a casa. Una vez aquí, asumimos la
certera mano de Carlos: nos había concedido cinco títulos gestacionales, con
los que podremos [deberemos] fundar una
realidad, un mundo nuevo, desde cero.
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